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Administración Electrónica

El plan de desarrollo de la LAECSP: una oportunidad perdida

060Varios blog, entre ellos Sociedad en Red y Administración y TIC se hacen eco de la publicación por el MAP del Plan de desarrollo de la Ley de acceso electrónico de los ciudadanos a los Servicios Públicos (LAECSP). Se trata de un plan muy enfocado a la consecución de uno de los mandatos expresos de la ley, el cumplimiento del artículo 6, esto es, el derecho de los ciudadanos a relacionarse electrónicamente con las Administraciones Públicas, con la fecha límite del 31 de diciembre de 2009 para poder ejercer este derecho en todos los procedimientos gestionados por la AGE, y con el resto de las Administraciones «siempre que lo permitan las disponibilidades presupuestarias».

La mayoría del Plan de Actuación está centrado en el análisis de los procedimientos existentes, cuáles están «telematizados» ya y cuáles no, agrupados por Ministerios. Hace un análisis de impacto de los 2.413 procedimientos administrativos a adaptar, destacando 155 procedimientos que concentran un 75% del volumen total de tramitación en la AGE. 48 de ellos estarían ya adaptados para su tramitación telemática. En el calendario de adaptación se abordarían en 2008 los 107 procedimientos de alto impacto todavía no adaptados, y el resto en 2009.

Hacia el final del documento se exponen una serie de medidas horizontales, entre las que hay algunas muy interesantes: Además de las consabidas SARA y @FIRMA se habla del desarrollo de Solución de archivo electrónico, plataformas de apoyo a la tramitación electrónica y de acceso a la traducción a las lenguas cooficiales, así como el desarrollo del Esquema Nacional de Interoperabilidad y Seguridad y el Centro de Transferencia de Tecnología y Observatorio de la Administración Electrónica.

El Plan de Actuación termina exponiendo el análisis de los recursos para la ejecución del plan: económicos, técnicos, humanos y organizativos. Para mí esta es la parte más débil del documento y también del Plan.

Con respecto a los recursos económicos, se limita a decir que las TIC crecen año a año en la AGE, siendo el crecimiento del año 2008 respecto al 2007 del 13%. Después de la congelación que se produjo entre los años 2002 y 2006, ya era hora. En una organización de uso intensivo de la información como son las Administraciones, el incremento de la inversión en TIC es un imperativo. En todo caso, no sabemos qué parte de estos presupuestos se destinarán al desarrollo de la LAECSP, lo cual para mi es equivalente a decir que no tiene un presupuesto específico, salvo quizás los 35 millones de euros que el propio MAP declara tener dedicados expresamente a este Plan. En cambio, si se hubiese abordado la creación de la Agencia de Infraestructuras y Servicios Electrónicos (AISE), si sabríamos con nitidez que presupuestos estarían dedicados a estos menesteres.

En referencia a los recursos técnicos, se vuelve a insistir en la red SARA y en los servicios construidos en torno a ésta. Una vez mas insisto en que el enfoque correcto para el desarrollo e implantación de estos servicios comunes pasa para mí por la AISE.

Con respecto a los recursos humanos, es cierto que este año ha aumentado la oferta de plazas del cuerpo superior TIC hasta ¡90!. En todo caso el Plan no entra en este aspecto. En realidad no entra en nada referente a los recursos humanos, excepto para decir que hay que hacer un Plan de Formación para todos los empleados públicos.

Por último, el aspecto organizativo se limita a la creación de un Grupo de alto nivel dependiente del Consejo Superior de Administración Electrónica, una Oficina Técnica de Seguimiento y un Grupo de trabajo Interdepartamental. Es decir, de medidas organizativas específicas nada de nada, ni la Agencia, ni las Direcciones Generales de TIC en los Ministerios, que podrían adoptarse de forma complementaria o sustitutiva de la Agencia.

Hemos perdido una oportunidad de oro para abordar, o empezar a abordar, el cambio organizativo necesario en las administraciones, oportunidad que la Ley 11/2007 abrió, y que ahora se ha cerrado. El cambio organizativo es necesario si queremos aprovechar las posibilidades de las TIC, según dice repetidamente la OCDE e insiste de nuevo The Economist en el artículo sobre el e-Government, Government offline, recogido por Enrique Dans en Los problemas del e-Government.

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Administración Electrónica Gobernanza

eGovernment Conference 2008 – Alliance with Users

A través del blog de epractice.eu me entero de la convocatoria de esta conferencia para el próximo mes de febrero, bajo el lema «Alianza con los usuarios», en el encantador país de Eslovenia, que tiene encomendada la presidencia europea en el primer semestre de 2008.

Desgraciadamente no podré asistir, aunque el programa parece bastante interesante, abordando dos temas claves: la alianza, entendida como colaboración y casi complicidad, y los usuarios (cuidadanos y empresas) en el foco.

También desafortunadamente no hay previsto ningún ponente español en la conferencia. Siempre que veo un programa de alguna conferencia europea me fijo y muy a menudo no hay nadie español. Esta carencia me duele y me reafirma en mi convicción de nuestro provincianismo carpetovetónico, con las consabidas excepciones. A ver si un dia lo superamos.

Bueno, volviendo al tema de la Conferencia eGovernment, el MPA (Ministry of Public Administration) de Eslovenia publica un artículo explicando su estrategia de eGobierno para el periodo 2006-2010.

El eje central de esa estrategia es el siguiente: «El factor más importante y objetivo global, que será la fuerza motora detrás del desarrollo del eGobierno son los usuarios satisfechos«. La estrategia se apoya en cuatro objetivos principales:

  1. Calidad y eficiencia de las operaciones
  2. Administración Pública abierta y transparente
  3. Sistema eficiente de empleados públicos y gestión eficiente de los recursos humanos
  4. Orientación al usuario de la Administración Pública

También hay un interesante gráfico que me permito reproducir aquí:egovernment

Lo que más me gusta del grafico es precisamente el colocar al usuario (aka Ciudadano) entre las dos fuerzas públicas reconocidas: la Política y la Administración. Curiosamente, para ellos, la e-administración no sería entre la administración y el ciudadano sino entre la política y la administración, y las relaciones entre ciudadanos y administraciones están basadas en los llamados e-servicios.

Así pues entienden e-administración más bien como el backoffice, no sólo tecnológico, sino organizativo y humano.

En conclusión, el eGobierno se apoya en la orientación al usuario, de modo similar a nuestro ordenamiento reciente en la ley 11/2007, pero añade un importante componente organizativo y humano interno (lo cual no está contemplado expresamente en la ley 11/2007), y contempla separadamente los dos ejes públicos: el político y el funcionario. Algo que todos sabemos en el fondo, pero que por algún motivo tenemos bastante confuso y nos cuesta abordar. Pero que hay que tener en cuenta siempre al diseñar las políticas, programas y actuaciones.

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Tecnimap Gijón: en directo y en diferido

En directo… En estos momentos me encuentro en el stand de T-Systems, en compañía de Carlos Guadián, Montaña Merchán, José de Rafael , Director General de AEC y Jorge Márquez, preparando la presentación de AE 2010 (bajar informe) Video Windows Media. Sobre el desarrollo de ese acto, muy esperado y significativo, Montaña seguramente hará una más extensa e intensa descripción en este mismo blog. Aunque anticipo dos, para mí, importantes características del mismo: que ya era hora, pues si nos descuidamos se nos pasa el arroz (¿no habría que empezar a pensar ya en 2015?), y que tiene un valor especial por haber sido diseñado de abajo a arriba. Espero que este informe tenga continuidad.

En esta Sociedad Conectada, teniendo ya con antelación y en la WEB todas las comunicaciones, donde se transmiten en directo y en diferido las ponencias (excelente calidad, y aún disponibles para todos), y podemos poner las preguntas vía Twitter, pudiera pensarse que asistir en persona no es en absoluto necesario. Pero la verdad es que más de la mitad de la actividad del TECNIMAP es puritito networking. HABLAR. Por supuesto en cualquier sitio y con cualquier motivo, y de cualquier tema.

Habiendo unas seis mil personas pululando por aquí es que no te queda otro remedio, no te acuerdas de la cantidad de gente que conoces hasta que te los vas encontrando uno a uno. Para esa actividad es inmejorable, todavía, el contacto personal.

Además de esta actividad social, algunas ponencias fueron muy interesantes. Por ejemplo la de Ignacio Alamillo, de la Agencia Catalana de Certificación CATCERT, quien hizo un análisis de riesgos de los sistemas de firma electrónica, a la luz de la ley 11/2007 Video Windows Media (aunque tuvo que correr porque se iban los autobuses). También me gustó la intervención de Juan Miguel Márquez Video Windows Media, Director General de Modenización del MAP, en la mesa Administración 2.0. Me pareció que Juan Miguel, que ha entendido perfectamente lo que debe ser la Administración 2.0, hizo un discurso valiente y realista a la vez. Y eso es muy importante para una persona en su posición. Juan Miguel: contamos contigo.

En el acto de clausura, la Secretaria General para la Administración Pública, Mercedes Elvira del Palacio, dá algunas cifras: 6000 congresistas en vivo y seiscientos en remoto por internet, 147 ponencias y 200 periodistas, resume muy bien en tres palabras la Administración 2.0: Interactividad, Participación, Proactividad, y… una cuarta: Transparencia. También anuncia la sede de la próxima edición del Tecnimap: Zaragoza (suponemos que en las instalaciones de la Expo y después de ésta).

Y en diferido…

Sólo algunas pequeñas reflexiones del día después.

Primero, respecto a la organización: a pesar de algunos pequeños fallos en temas menores, como pudo ser la entrega de la documentación a los asistentes, creo que ha hecho una buena labor, y se muy bien que no es fácil organizar un mega-evento como éste. Lo mejor: las retransmisiones en directo. A mejorar: la información presencial. Algunas de las enormes pantallas podrían haber dado más información de los eventos que se estaban celebrando en cada momento, que además estaban sujetos a cambios de última hora. Los SMS han funcionado, pero se podían haber utilizado más: sólo tengo seis recibidos en mi móvil.

Respecto a la estructura del evento en sí, una opinión que he escuchado repetidamente es que es demasiado largo. Lo esencial se concentra el jueves. Yo estuve dos días (1/2+1+1/2) y creo que no me perdí prácticamente nada. La gente que vino el lunes estaba un poco cansada de feriar.

También parece que respetar los dos años entre iteraciones es razonable, para no amontonar y descafeinar los Tecnimases excesivamente juntos. Sin embargo, de algún modo, me ha parecido que éste tiene algo especial, no sé si porque se ha puesto en valor, una y otra vez, la ley 11/2007, que yo creo va a marcar un antes y un después en el avance de la eAdministración.

Aún así, no creo que la fórmula esté agotada, pero seguramente hay que adaptarla todavía más al 2.0, dotar de continuidad las iniciativas y los temas tratados.

Bueno os dejo con las fotos de Mi Tecnimap por si las queréis echar un vistazo.

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Administración Electrónica Sociedad de la Información Tecnologías de la Información

Observando los observatorios

ObservatoriosA través del muy interesante blog de epractice.eu me entero de la existencia de una red de observatorios que recientemente ha celebrado un workshop en Bruselas. Victor Prieto ha elaborado una interesante encuesta en esta red de observatorios Victor_Prieto_Map_of_observatories.pdf con algunas estadísiticas curiosas:

  • De los 34 países que han contestado a la encuesta, España es el ganador con 14 observatorios. En segundo lugar, Rumania con 10, luego Italia y Bélgica con nueve (qué queréis que os diga, me sorprende, no sabía que los españoles fueramos tan observadores).
  • Las tres principales áreas de interés son: Administración Electrónica, Sociedad de la Información y TIC (¡vaya casi lo mismo que las principales categorías de nuestro blog!)
  • La mayor parte de los observatorios tienen menos de cinco empleados, y publican en el idioma oficial de cada país.
  • El foco principal es nacional, seguido por el ámbito regional y europeo
  • La mayoría publican sin un ritmo predefinido, recogen información sistemáticamente, miden indicadores aunque no regularmente, producen estudios a salto de mata, y organizan eventos con regularidad.
  • Casi todos buscan intercambio de información y contribuyen con información

Luego viene un desglose de datos muy prolijo y poco ilustrativo que no reproduzco.

Así que, según esta encuesta, el observatorio típico sería una entidad del sector público español, dedicado a observar la eAdministración, eSociedad y TIC, publicaría en español y tendría menos de cinco empleados.

Mmm, no sé, me suena de algo 😉

Ah, por cierto, el próximo congreso de la red de observatorios lo organizará red.es el 24 y 25 de enero de 2008.

Estaremos observando.

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Administración Electrónica web 2.0

Administración 2.0

Circula por la red un gracioso pero muy certero chiste o cuento llamado Actualizar de NOVIA 7.0 a ESPOSA 1.0. Los que hemos trabajado en las unidades de informática nos sentimos identificados por la problemática común del cambio de versión y los quebraderos de cabeza que acarrea.

En el post Administración 1.0 veíamos el largo y curvo camino recorrido hacia la eAdministración y en Administración 1.5 vemos cómo nos encontramos ahora en una encrucijada: ¿vamos a acabar de poner en marcha la versión 1.0, que nunca funcionó del todo bien, o esperamos a la nueva versión 2.0, de la que hablan maravillas, aunque de momento todo lo que hay son betas?

La moda «dospuntocero» se origina hace muy muy poco: fué en 2004 cuando se organiza por primera vez la Web 2.0 conference. Para obtener luz sobre su esencia, acudimos a su definición en el libro Web 2.0 de la fundación Orange:

«Es en ese escenario, en el que interactúan lo social (cómo y dónde nos comunicamos y relacionamos) y lo tecnológico (nuevas herramientas, sistemas, plataforas, aplicaciones y servicios) provocando cambios de lo uno sobre lo otro. Surge una nueva Red caracterizada como la web de las personas frente a la web de los datos, correspondiente a la versión uno, la Web 1.0.»

Y entonces, ¿qué es la Administración 2.0?. Bueno quizás en Tecnimap lo sepan, pues han adoptado ese lema para la edición de 2007. Desde luego lo que para mí no es sólamente la eAdministración en el sentido tradicional del término, o sea, las TIC aplicadas a la gestión de los procedimientos y a la relación con los ciudadanos.

Muchos antes que yo, incluso en este mismo Blog, han entrado a este trapo. Administracion 2.0 de Chica Gato, Más sobre Administración 2.0, de Alorza, Administración 2.0, (éste me gusta especialmente) de Carlos Guadián, … todos pesos pesados. Pero bueno, para eso estamos, para modelar entre todos esta, todavía informe, escultura.

En los programas de ayudas para la incorporación de las TIC en las empresas se un especial hincapié en huir del modelo de tecnificación clásico, basado en el PC y la aplicación de gestión (ahora lo llaman ERP). Se va un paso más allá impulsando la transformación del modelo de negocio, de los procedimientos internos, de la cadena de suministro, de las estrategias de marketing, de la competencia en un mercado global. Así pues confiamos que la utilización de la tecnología en las Administraciones lleve, tarde o temprano, de forma inevitable e inexorable a una transformación de las mismas.

Una cierta visión mecanicista estaría representada fundamentalmente por la definición de la Administración 2.0 como la promoción de uso de las herramientas 2.0. Es decir, si utilizamos wikis y blogs, si hacemos un poco de personalización por aquí, un poco de twitter por allá, ponemos unos videos en youtube… pues ya como que casi hemos hecho la Administración 2.0.

¿De verdad es tan fácil? ¿Entonces porqué iniciativas como los foros del 060 no funcionan y otras parecidas como «Las 1001 ideas«funcionan?. Alorza explica con lucidez, y sin pelos en la lengua, en su post El éxito de las 1001 ideas de ProPolis algunas de las posibles causas. Aunque no implica que yo esté necesariamente de acuerdo con todas ellas, lo que si es cierto es que la tecnología, sola, la herramienta pura no es suficiente

Adopción de la InnovaciónRecientemente he escrito varios artículos donde doy la clave de lo que debería y lo que no debería ser la Administración 2.0. En Burrocrracia manifestaba mi rechazo a la simple mecanización del procedimiento, sin acometer un rediseño del mismo para tomar ventaja de la tecnología. En Por una Administración de la Innovación me atrevía a sugerir, basandome en un informe de IPTS, un enfoque más innovador, en el que va a cambiar el papel social de la Administración Pública, apoyandose por supuesto en la tecnología, pero centrandose más en la creación de valor para la sociedad que en la eficiencia de los servicios como destino final de la eAdministración.

Podríamos poner algunos ejemplos para clarificarlo. Sabemos que la reciente Ley de Contratos del Sector Público, establece dos cosas, una es la obligatoriedad, en un cierto plazo, de facturar electrónicamente a las AAPP, y la otra la creación a corto plazo de estandares para la remisión de esas facturas. Es conocido el caso de Contratación electrónica pública en Dinamarca, pionera en este tipo de medidas, que ha tenido un gran éxito. Así pues, la Administración ejerce de líder tecnológico, ayudando a las empresas y traccionando a la sociedad, en ámbitos en los que el sector privado, sólo, no es capaz de avanzar lo suficiente, ni con la suficiente velocidad.

En el ámbito de los ciudadanos, tenemos otro ejemplo muy claro en el impulso a las actuaciones de identidad electrónica y firma digital, especialmente el dedicado al e-DNI. Obviamente, estamos en el comienzo, y un simple cálculo nos arroja décadas hasta que estas herramientas sean aceptadas y usadas comunmente por los ciudadanos, pero las ventajas son inmensas.

Bueno, para concluir, haré una pequeña parodia del estilo del cuento que citaba al principio de este post, como una carta que un usuario que acaba de cambiar de versión envía al servicio técnico.

Estimados Sres. del Servicio Técnico:

El mes pasado cambié de la versión de ADMINISTRACION 1.0 a la nueva versión ADMINISTRACION 2.0 y he observado que el programa inició varios procesos inesperados que ocupan mucho espacio y recursos importantes. En el folleto explicativo del programa no venía mención alguna a este fenómeno. Además, nueva la versión 2.0 se autoinstala en todos los demás programas y se ejecuta durante el inicio de cualquier otra aplicación, interrumpiendo todas las actividades del sistema.

Aplicaciones que antes funcionaban como ALEGACIONES Y RECURSOS 6.0 , DIAS HABILES 3.6, AJUSTES PRESUPUESTARIOS 1.9, ORGANIGRAMAS 3.0, ya no funcionan, y, lo que es peor: el sistema se cuelga cada vez que intento cargarlos.

De vez en cuando, aparecen avisos de personas a las que no he invitado que intentan hablar conmigo, a través de un programa residente que no he conseguido bloquear.

Aparentemente, no puedo lograr mantener a ADMINISTRACION 2.0 en minimizado al ejecutar alguna de mis aplicaciones favoritas. Estoy pensando en volver al programa anterior ADMINISTRACION 1.0 pero no me funciona el Desinstalar.

¿Me podría ayudar?
Gracias.
UN USUARIO AGOBIADO.

Estimado USUARIO:
Este es un motivo de queja muy común entre los usuarios de ADMINISTRACION 1.0 , pero se debe en la mayoría de los casos a un error básico de concepto: Mucha gente aumenta la versión de ADMINISTRACION 1.0 a la 2.0 con la idea de que ADMINISTRACION 2.0 es sólo una actualización con nuevo interfaz gráfico y algunas utilidades adicionales.

Sin embargo, ADMINISTRACION 2.0 (al contrario de ADMINISTRACION 1.0) es un SISTEMA OPERATIVO completo. Y su creador lo diseñó para controlar todo el sistema.

Es muy poco probable que pueda configurar de nuevo a ADMINISTRACION 2.0 y volver a la versión anterior. Hay una funcionalidad de emulación incorporada en ADMINISTRACION 2.0 para hacer las funciones de la versión 1.0, por compatibilidad, así que no parece necesario.

Es imposible desinstalar, eliminar o configurar los archivos del programa una vez instalados. No puede volver a ADMINISTRACION 1.0 porque la versión 2.0 no está programado para eso. Hay quienes han intentado el FORMATEO TOTAL DEL SISTEMA para luego instalar los programas ADMINISTRACION 1.0, pero sinceramente, le recomiendo vea el Manual, apartado «Precauciones», en el capítulo «Volver a hacer todos los trámites a mano» y se convencerá de que no es una buena opción.

ADMINISTRACION 2.0 es un programa muy interesante, pero con un alto costo de mantenimiento. Considere la posibilidad de instalar algún software de cooperación social para repartir el trabajo y lograr decisiones consensuadas.

Un saludo.
Servicio de Atención al Usuario

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Administración Electrónica

Administración 1.5

En el anterior post veiamos el largo camino que nos conduce hacia la e-Administración 1.0. Porque esta e-Administración, que yo etiqueto como 1.0, no es ni más ni menos que una evolución de las redes, sistemas, aplicaciones y servicios públicos, tecnificándolos, reemplazando medios, pero manteniendo su diseño y filosofía. Es decir, nada nuevo en el fondo, excepto un cierto perfume de modernidad.

Porque, ¿dónde estamos ahora?.

En una encrucijada.

Nuestro post «eGovernment Benchmark Survey 2007 » se hace eco del análisis de la Comisión Europe, realizado por Cap Gemini, sobre el avance de los servicios públicos electrónicos. Quizás a algunos les puedan tranquilizar las cifras que se ofrecen sobre España (70% en disponibilidad de servicios y de 84% en sofisticación) pero a mi no me satisfacen por varias razones.

Para empezar, la situación es muy desigual. En lo que se refiere a la prestación de servicios públicos electrónicos, todos estamos haciendo cosas, pero el grado de avance y el porcentaje de disponibilidad de los trámites del órgano administrativo competente es muy variable.

Así por ejemplo, en casos de excelencia como la siempre citada AEAT, o el mismo Ministerio de Industria, y algunas de las más avanzadas Comunidades Autónomas (Cataluña, Euskadi, …), ayuntamientos con mucho músculo como el de Madrid, o el de Fuenlabrada, por poner algunos ejemplos (sé que me dejo muchos en el tintero), no cabe duda de que están en la brecha, son el ejemplo a seguir.

Pero, ¿están todas las administraciones a este nivel?. Evidentemente, no. Además, servicios básicos para el cuidadano, como el acceso a los diversos Registros (Registro Civil, Padrón de habitantes, …) y otros trámites comunes como la renovación del carnet de conducir aún no están en Internet, aunque se anuncian.

Porque no debemos olvidar que el análisis de Cap Gemini citado se ocupa sólo de los 20 servicios básicos, y que el rango de servicios que ofrecen las administraciones es muy superior. Siempre estoy a favor de los análisis comparativos, en el tiempo y con nuestros compañeros, pues tienen un importante efecto tractor. Pero en este caso a mi me gustaría ir un poco más allá.

Por ello quiero hablar del uso real de esos trámites electrónicos que hacen los ciudadanos o las empresas. En la misma página de la Comisión aparece el i2010 annual Report 2007 for Spain. Las cifras que ofrece, del año 2006, es que un 23,8% y un 58,1% de los cuidadanos y empresas, respectivamente, han utilizado los servicios de e-Administración, pero sólo el 7% de los ciudadanos de forma interactiva, y 38% de las empresas en forma intercativa (han rellenado algún tipo de formulario). Es decir, que uno de cada cuatro ciudadanos y una de cada dos empresas sabe que el Ministerio, Comunidad Autónoma o Ayuntamiento que sea tiene página web y ha acudido a ella en busca de información, y probablemente la haya encontrado (no sé los datos, pero quizás sólo los hits en el BOE puedan ya dar cuenta de esta estadística) . Y sólo uno de cada catorce y una de cada tres empresas han interactuado al menos una vez al año electrónicamente con las AAPP.

De hecho, estamos en una situación de transición, que se complicará en los próximos años. Ahora para cada trámite electrónico que ponemos en línea acabamos teniendo que soportar dos caminos, el tradicional y el del papel. Esto no sólo produce más trabajo para los encargados de gestionar el trámite y de los encargados de proveer los medios para ello. También produce desajustes entre ambos caminos que es preciso reconciliar de una manera u otra. Y para colmo, muchas de las teóricas ventajas de la electronificación del trámite se pierden por el hecho de mantener la doble vía.

Pero no queda otro remedio, la ley 11/2007 LAECSP lo deja bien clarito en su artículo 6, a partir del 31 de diciembre de 2009, todos los trámites de la AGE deberán estar disponibles electrónicamente, y los de las Comunidades Autónomas y de los Ayuntamientos «siempre que lo permitan sus disponibilidades presupuestarias».

Hay excepciones a la doble vía, por supuesto. Las ayudas a la I+D para proyectos de TIC convocadas por el MITYC por ejemplo ya se tramitan exclusivamente por vía electrónica, con obligatoriedad de uso de firma electrónica. Para ello se apoya en un Registro de Entidades que realizan actividades de I+D. También tenemos casos como el Servicio de Licitaciones Electrónicas de la Generalitat de Catalunya, que también se apoya en un Registro Electrónico de Empresas Licitadoras. Está claro que ambos casos son posibles por la naturaleza opcional del trámite, pero cuando el trámite tenga caracter obligatorio, como por ejemplo las tasas o impuestos, no podremos en principio contar con esa ventaja.

Las empresas españolas, además de salir estupendamente retratadas en los indicadores del informe eGovernment, están de suerte, ya que están recibiendo un importante empuje en los programas de apoyo del Plan Avanza, y especialmente en ámbitos como la Factura Electrónica no cabe duda de que se está echando el resto. Así por ejemplo la recientemente publicada Ley 30/2007 de Contratos del Sector Público, en la Disposición final novena, establece un plazo de un año para que se publiquen las normas que permitan el uso generalizado de la e-factura para todas las empresas con las que contrate la administración, tres meses después será obligatoria para las empresas grandes, y dieciocho meses después para todas las empresas.

En fin, para ir concluyendo este post está claro que «algo se mueve» en la e-Administración, razón por la que me atrevo a aventurar, por hacer una apuesta positiva, que estamos en la Administración 1.5.

Pero, ¿estamos ya en la Administración 2.0?.

Mmmm… todavía no.

Pero eso lo veremos en el siguiente post.

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Administración 1.0

Este año no he escrito nada para el TecniMAP. A decir verdad, mi trabajo actual me situa más dentro del lado de los consumidores que de los productores de la e-Administración. También me ha faltado tiempo material que no he podido rescatar de mis ocupaciones profesionales. No obstante, sí tenía pensadas algunas ideas, que aprovechando la red social, voy a intentar condensar y aportar al evento desde esta tribuna.

Como lo que pienso contar es un poco largo para encajarlo en un solo post, escribiré tres, denominados Administración 1.0, Administración 1.5 y Administración 2.0, reflejando el pasado, presente y futuro de la e-Administración, siempre obviamente desde mi óptica y experiencia personal.

Ingresé en la Administración en 1993. Entre los años 1994 y 1995 mi trabajo fué reemplazar las redes locales del Ministerio, basadas en ARCNET, por redes ETHERNET, a 10 Mbps, y troncal FDDI. Lo más novedoso y perdurable del proyecto fueron los sistemas de cableado estructurado, par trenzado categoría 5, que probablemente aún subsisten, y el sistema de direccionamiento TCP/IP, con los rangos de direcciones de la clase 10.10.*.* asignados por el MAP. Todo ello sentó las bases de los ulteriores sistemas que, combinando Windows NT y UNIX dieron cobertura a los sistemas y aplicaciones corporativas.

Como curiosidad, uno de los primeros escollos fué desmantelar el ordenador personal más grande del Ministerio: un UNIVAC que ocupaba todo el CPD, y que de hecho ya sólo tenía una única aplicación y un único usuario. El desmantelamiento se culminó con éxito, dejando sitio para todo lo que iba a venir a continuación.

La red del MinisterioEran los tiempos de Downsizing, del Cliente-Servidor, de los Sistemas Abiertos. Internet era algo de pocos, principalmente universidades, y los pocos ciudadanos que accedíamos era siempre por modem y RTC.

La informática, incluso en los sitios más avanzados como el nuestro, era siempre interna, con frecuencia fragmentada, y aparte de la nómina y alguna base de datos corporativa (y los inefables DBASE), todo se hacía obviamente en papel. El PC era el rey, aunque escasamente más que reemplazando a la máquina de escribir y a la calculadora. Podríamos decir que era la e-Administración beta 0.1.

En 1996 sucedieron dos hechos muy importantes, aunque de diferente signo: El Ministerio se conectó a internet, con su primera página WEB y su primer correo electrónico corporativo, basado en Lotus Notes, pero por otro lado el cambio de gobierno determinó que nuestra Subdirección General de Tratamiento de la Información no merecía tal rango, y desapareció, siendo asumidas sus funciones por la Oficialía Mayor.

Compartir espacio con los fontaneros, los electricistas, y las señoras de la limpieza, no fué que digamos un idilio, y quedó claro que venía a reflejar dos circunstancias: por un lado nos aplicaron el estatus que, según algunos, correspondía a unos meros «proveedores de servicios», pero al mismo tiempo podria ser consecuencia de un creciente temor por la creciente dependencia e influencia de «los informáticos» en los asuntos de palacio, lo que pudo haber pesado en las decisiones que provocaron este retroceso.

Guia de Aplicaciones y ServiciosPoner en marcha Lotus Notes costó muchos esfuerzos, en especial su pasarela con X.400, lo que entonces era el troncal de correo corporativo de las Administraciones públicas, aunque liderado por el Ministerio de Asuntos Exteriores. Por contra, aprovechando las posibilidades que este entorno ofrecía, se desarrolló una aplicación de gestión de servicios interna, con interfaz basado en WEB y enlazada con el correo electrónico, que estuvo funcionando para todo el Ministerio hasta el año 2005. Al mismo tiempo las aplicaciones corporativas seguian creciendo, Oracle 7 era el rey, y ya se empezaba a hablar de la arquitectura de tres capas… aunque también mucho de los virus.

A finales de la década se levantó un notable revuelo por el temido «Efecto 2000«. Tuvo muchos efectos beneficiosos: el más visible, que se aprovechó para renovar todo el parque de equipos y de aplicaciones. También se desarrolló un Plan de Contingencias, probablemente el primero que se realizó en el Ministerio, al menos en el ámbito de los sistemas de información. Pero para mí el mayor de los efectos fué la toma de conciencia de que las TIC se habían convertido en un elemento crítico en las organizaciones, y particularmente en las Administraciones Públicas. Así que a finales del milenio seguramente nuestra e-Administración era ya versión 0.5… aunque seguía siendo beta.

El año 2000 sí que trajo sin embargo una revolución: nuevas elecciones y esta vez no se cargan la Subdirección de informática sino el Ministerio de Industria y Energía entero. ¡Larga vida al Ministerio de Ciencia y Tecnología!. Seguramente esta es la época más turbulenta que recuerdo. ¿Habeis vivido alguna fusión de grandes empresas u organizaciones?. En dos legislaturas consecutivas yo viví dos, ambas diferentes, y os aseguro que no es divertido. Además, hay que dedicar tantos esfuerzos que durante dos años casi no haces otra cosa que reorganizar servicios y gente. Tiempo perdido para modernizar la Administración.

Aún a pesar de ello se hicieron muchas cosas. Se consolidaron los servicios corporativos de todo tipo. Se implantó el Directorio Activo. Se hizo una migración de datos masiva hacia los sistemas especializados (SAN). Se empezaron a desarrollar aplicaciones de firma electrónica. Se empezaron a usar Portales para organizar la publicación en la WEB. Y lo más importante, ya se pusieron en marcha los primeros sistemas interactivos de tramitación en línea, aplicados a las ayudas de Proyectos de I+D.

MinisteriosSalir a la calle con sistemas interactivos fué mucho más dificil de lo que habíamos calculado, y nos pegamos algunos fuertes batacazos. De repente, el controlado mundo de la intranet ya no era aplicable. Servidores en cluster, balanceadores, máquinas virtuales java, y teléfonos hirvientes, domingos hasta la madrugada rezando para que el sistema no se cayese … sin éxito. Aprendimos duramente conceptos como pruebas de carga y calidad de servicio. No sólo los funcionarios, sino las empresas que se embarcaron con nosotros en la aventura. De todos modos al final de todo ello habíamos llegado a la e-Administración 0.9 … aún beta.

En 2004 nuevas elecciones y nuevo Ministerio… de Industria que resurge de sus cenizas, aunque transformado, y acompañado por Turismo y Comercio. Vaya, casi reconstruyen el antiguo MICYT, aunque con el orden cambiado. Vuelta a empezar, cambiar todo, unos que vienen, otros que se van. No voy a hablar de tecnologías aquí, pero sí de los compañeros que empezamos el viaje en la Industria del 1993. En esta última vuelta de tuerca la fuerza centrífuga ha sido ya demasiado fuerte y ha terminado por dispersarnos a todos: algunos en MUFACE, otros en el CSIC, otros en el Ayuntamiento de Madrid, otros en Economía y Hacienda, … otros en Sociedad de la Información.

Bueno, ya no me cabe duda de que en estos últimos años el Ministerio sí que ha alcanzado la e-Administración 1.0, y se dirije raudo hacia la 2.0, pero… esa es otra historia.

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El Trámite Electrónico

ExpedienteDefine Chica Gato, en su post «El trámite de Potemkin«, aquel que es electrónico en los puntos en que contacta con el ciudadano, pero manual en el resto del procedimiento, es decir, el que viaja por las procelosas aguas del interior de los Ministerios.

La ley 11/2007 (LAECSP), por su parte, cita de pasada y en un sólo párrafo el trámite electrónico, sin atreverse a definirlo en el glosario: «...utilizar …. el Documento Nacional de Identidad para cualquier trámite electrónico…«. Dedica sin embargo todo un título, el tercero, a la gestión electrónica de los procedimientos, incluyendo un artículo dedicado a la actuación administrativa automatizada. Curiosamente, esquiva aquí la equiparación con trámite o procedimiento, para acudir a un concepto nuevo, la actuación, quizás para evitar confrontaciones con la ley 30/92.

En esta misma Ley de Procedimiento Administrativo, el trámite viene a definirse implícitamente como la actuación administrativa unitaria o elemental que compone los procedimientos administrativos: «Artículo 74. Impulso. El procedimiento, sometido al criterio de celeridad, se impulsará de oficio en todos sus trámites

Creo yo que ya es hora de hablar del trámite electrónico como aquel trámite que utiliza en todo su recorrido sistemas y aplicaciones informáticas, sin necesidad del «paso a papel» y reconversión a electrónico que se realiza en muchos de los casos en que se anuncia la automatización de un procedimiento para el ciudadano. Podríamos, por extensión, hablar también del Procedimiento Electrónico, como aquel que es gestionado electrónicamente en su totalidad.

TrámiteDudo que exista el genuino trámite electrónico en la actualidad, completo, extremo a extremo, y funcionando. El caso más común que conozco es, retomando el esquema diseñado por Chica Gato, aquel en el que el procedimiento de gestión interno está apoyado en lo que llamaremos «La Aplicación».

Esta Aplicación es ese ser oscuro, indomable y hermético, que sólo puede ser controlado gracias a las habilidades y arrojo del informático.

La Aplicación adopta múltiples formas, siendo las más simples la hoja de cálculo o la base de datos local o compartida, y la más completa el sistema informático corporativo centralizado y controlado por la Subdirección General de Informática de turno.

El algunos casos, la Aplicación acaba siendo el eje central de todas las actuaciones, hasta el punto de que a la hora de gestionar los trámites se termina por demorarlos o distorsionarlos, pues «la aplicación no lo permite«, «la aplicación no está preparada«. A cambio, también se utiliza como excusa generalmente aceptada: «la aplicación no funciona hoy«, «lo siento, se ha producido un fallo en la aplicación«.

En el más puro estilo burrocrático, es conveniente tener siempre una aplicación o sistema informático a quien imputar los males, deficiencias o insuficiencias de los trámites y procedimientos administrativos.

En buena ley, es preciso reconocer que no es fácil automatizar los trámites y procedimientos administrativos, por varias razones:

  • La complejidad y ambigüedad de la legislación, y su variable interpretación según criterios geográficos, temporales o según a quien le preguntes
  • La elevada frecuencia con que son modificadas las leyes y reglamentos
  • El hecho de que no han sido pensadas para su automatización, arrastrando vicios y defectos del trámite manual
  • La escasez de recursos para lidiar con todo lo anterior

Así pues, y como conclusión: para el diseño y puesta en marcha de un buen trámite electrónico es preciso un acercamiento entre el técnico y el legislador: diseñando las herramientas informáticas al servicio y según las necesidades del procedimiento, pero también diseñando o rediseñando los procedimientos para facilitar, y tomar ventaja, de la tecnología, con el fin último de mejorar el servicio al ciudadano.

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NB Agradezco a Forges y minihomenajeo desde aquí su fino humor funcionarial, que falta nos hace.

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Rentabilidad de las TIC en las organizaciones públicas

imagen1.jpgLlega el otoño, y con él, tiempo de hablar de dineros. O, al menos, así lo entendió ASTIC, quien en su evento Meeting Point 2007 incluyó una mesa redonda con el interesante título que encabeza este post. Y también Rafa Chamorro cuando escribe sobre los Presupuestos Generales TIC.

Podemos achacar a la hora intempestiva de la mesa en cuestión, hora en que el cuerpo hispano pide siesta, el hecho de que prácticamente ninguno de los ponentes abordase el tema a fondo. O, mejor, lo podemos achacar a la auténtica dificultad de hablar en términos de rentabilidad de la tecnología en el contexto de las AAPP.

Porque hablar de rentabilidad en las empresas es bastante fácil (en principio) pues consiste en comparar gastos con ingresos, y subsidiariamente en otros beneficios no directamente trasladables en ingresos, pero que, tarde o temprano, también son trasladables en términos monetarios. Así lo entiende el Ministro Clos que ha señalado en la comparecencia en el pleno del Senado del 24 de octubre que «con el Plan Avanza el Gobierno pretende avanzar en la construcción de la Sociedad de la Información, para mejorar la productividad y competitividad de nuestra economía.»

Pero la rentabilidad de las TIC en las organizaciones públicas es otro cantar. Bueno, vamos a empezar por la parte fácil: la rentabilidad en los organismos públicos que tienen ingresos. Ejemplo: la AEAT. En este caso es relativamente fácil argumentar una relación causa-efecto entre la utilización de la tecnología y el aumento neto de recaudaciones, siempre por supuesto respetando la seguridad jurídica necesaria.

Cuando no es posible acudir al incremento de ingresos, siempre podemos intentar la reducción de gastos. Es difícil demostrar esta reducción en las AAPP. Para empezar, el resultado de un proceso de automatización, que en las empresas conduciría a un ahorro en recursos humanos, en las AAPP puede conducir a un verdadero conflicto social, al tener a unos cuantos funcionarios en pie de guerra, despojados de sus funciones.

Una inteligente derivada, que me enseñó en tiempos Pedro Maestre, consiste en trasladar ese ahorro no al interior de las AAPP sino a los propios ciudadanos. Su argumento es tan simple como «si informatizamos un trámite que se realiza 1.000 veces al mes, y ahorramos al ciudadano una hora de desplazamiento, a 20 €/hora de sueldo, supondría 20.000 euros de ahorro mensual. Así pues si la inversión es de, digamos, 60.000 euros, aún hemos conseguido una rentabilidad de 2 a 1, o sea, 2 euros de ingresos por cada euro de gasto.»

Pero en el fondo, la justificación del ahorro es pobre, insuficiente y, lo confieso, casi siempre irreal. Así que la rentabilidad ha de argumentarse en base a beneficios para la sociedad, más o menos intangibles, y por ello un tanto etéreos, salvo que hablemos de casos y situaciones concretas. Entre ellos están los siguientes:

  • Simplificación de trámites. Ventanilla única.
  • Nuevos servicios. Difusión de información. Agilidad, inmediatez. Horario ampliado.
  • Acercamiento de la Administración al Ciudadano. Transparencia. Acceso a discapacitados y otros colectivos desfavorecidos. Apoyo al inmigrante.
  • Nuevos modos de acceso. Movilidad. Multidispositivo.
  • Efecto tractor de la tecnología en las AAPP sobre la sociedad. Compras públicas innovadoras. Generación de confianza en la tecnología. Liderazgo tecnológico: DNIe.
  • Participación. Personalización. Retroalimentación.

Finalmente, y por enlazar de nuevo con el post de Rafa sobre los presupuestos TIC, la rentabilidad ha de apoyarse en la eficacia del gasto, es decir hay que exigir el mejor resultado posible con un presupuesto dado. Es muy fácil en la AGE justificar el gasto en capítulo 6 (inversiones), algo menos en capítulo 2 (gastos corrientes, mantenimientos) y francamente mucha dificultad en lo referente al capítulo 1: gastos de personal. Como consecuencia se produce con facilidad la descapitalización humana, produciéndose fugas de funcionarios a otras administraciones donde están mejor pagados, o a las empresas, en trabajos casi siempre relacionados con las AAPP.

Pero no nos engañemos, por muchas inversiones que hagamos en TIC, la cantidad y calidad de los resultados los dan las personas, y es a las que deberíamos cuidar en primer lugar.

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Medidas horizontales para funcionarios

Se pregunta Morgana, en «Semana movidita» porqué todavía no hay un LDAP común para toda la AGE. Esto me ha hecho recordar algunas ideas que vengo rumiando de un tiempo a esta parte, ideas de medidas sencillas aplicadas de forma general a los funcionarios (en principio de la AGE) que permitiría la tecnología y que nos mejorarían la vida a todos.

La primera no es exactamente un LDAP sino una única dirección de email, con su consiguiente buzon asociado, de forma permanente, al funcionario. O sea, del estilo de felix.serrano@age.es. Más o menos lo que tiene Microsoft o Telefónica.

¿Ventajas?. Innumerables. ¿Que un funcionario cambia de Ministerio?. Mantiene su dirección de correo. ¿Que es el Ministerio el que cambia, aunque el funcionario siga en su sitio?. Mantiene su dirección de correo. Nada de migrar buzones. No hay que mandar avisos a los amigos y conocidos. Tampoco hay que dar la contraseña del buzón a uno de los que se quedan, para que entre de vez en cuando. Se acabaron los buzones sin dueño conocido, etc. etc.

¿Difícil?. GMAIL debe tener muchos millones de usuarios actualmente. Y con toda la funcionalidad necesaria. ¿Caro?. Seguro que más barato que el esquema disperso de sistemas de correo ministeriales actual.  ¿Inseguro?. Cuanto mejor gestionado esté, más seguro será. Podemos dedicar el dinero y esfuerzos ahorrados en hacerlo todo lo seguro que queramos.

La segunda de las medidas que propongo es también bastante simple: un móvil para cada funcionario.

Se trata de reemplazar el teléfono fijo actual, que tienen la mayoría de los funcionarios, por un teléfono móvil, con la misma numeración actual. Los funcionarios que ahora tienen fijo y móvil pasarían a tener un único número y terminal. Seguirían existiendo teléfonos fijos, pero para las funciones, no para las personas, de forma similiar a como pasa en el correo con los buzones corporativos.

Las ventajas inicialmente son parecidas al buzón de correo permanente. Un número de teléfono permanente, cambie o no el funcionario o el Ministerio. Movilidad. Localizabilidad, tanto si estás en la oficina como fuera de ella. Pero a medio plazo, este terminal universal aumentará su funcionalidad gracias a la tecnología. Coordinación de reuniones y otras actividades. Acceso al correo y a internet. Listín telefónico unificado. Firma electrónica en el móvil

En cuanto al coste, aunque sería preciso hacer un análisis económico más profundo, no creo que sea mayor que el mantenimiento de infraestructuras telefónicas actuales, que obviamente se simplificarían. También se pueden aprovechar las redes WIFI de los edificios corporativos para dar servicio a los móviles, ahorrando en todo caso mientras los terminales estén en el edificio, que será la mayor parte del tiempo. Y a medida que se vayan reemplazando terminales fijos por móviles, se producirá un ahorro, que se puede reinvertir en la mejora de la seguridad y de los servicios ofrecidos.

He dejado para el final otra de las medidas que propone Morgana, la nómina unificada de la AGE. De todos conocido es el famoso NEDAES, la aplicación que durante mucho tiempo ha distribuido el MAP a los Ministerios, como semilla o base de las aplicaciones de nóminas de los respectivos Departamentos.

Nedaes, y otras iniciativas de oferta tecnológica del MAP (como la Intranet Administrativa, ahora llamada SARA, nombre decididamente más sugerente), han tenido una eficacia limitada, ya que en mi opinión no es buena idea que un Ministerio se dedique a prestar servicios a otros Ministerios. La razón es que en una buena prestación de servicios debe haber un contrato, unas condiciones de prestación, una contraprestación económica, y unos mecanismos de regulación, todos ellos negociados.

Para que todas estas medidas funcionen no se me ocurre nada mejor que la creación de la famosa Agencia de Infraestructuras y Servicios Electrónicos, dependiendo orgánicamente, si queréis, del MAP pero con el propósito expreso de crear y mantener estos servicios, con los medios apropiados, rindiendo cuentas por ello, y con una vocación de eficacia y permanencia.